TIENE EN SU CESTA DE LA COMPRA
En total $ 0.00
"Pushkin me animaba desde mucho tiempo atrás a emprender una obra larga y seria. Un día me representó la endeblez de mi complexión, mis achaques, que podían ocasionarme una muerte prematura; me citó el ejemplo de Cervantes, autor de algunas novelas breves de primer orden, pero que jamás hubiera obtenido el puesto que le corresponde entre los astros de primera magnitud si no hubiera emprendido su Quijote..." Así relata Gogol la génesis de Las almas muertas, cuya redacción comenzó en 1835. El vizconde Melchor de Vogüe opinaría más tarde que "el verdadero progenitor de las almas muertas es el mismo Cervantes". Gogol estudió con empeño la literatura española "y, sobre todo el Quijote, que fue siempre su libro predilecto". En su libro sobre La novela rusa la condesa de Pardo Bazán desarrolla un paralelo entre el Quijote y Las almas muertas.