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47.- Sophie Germain. Las matemáticas como pasión
Título:
47.- Sophie Germain. Las matemáticas como pasión
Subtítulo:
Autor:
SÁNCHEZ
Editorial:
EDICIONES NIVOLA
Año de edición:
2013
Materia
Matemáticas en sus Personajes
ISBN:
978-84-92493-77-7
Páginas:
128
Encuadernación:
Rústica
Disponibilidad:
Solicitar informes
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Sinopsis

Biografía de Sophie Germain, matemática francesa nacida en París en 1776 que ha pasado a la historia de las matemáticas porque tuvo que disimular su condición de mujer bajo el seudónimo de Antoine Le Blanc.

Sophie Germain no es un personaje anecdótico en la historia de las matemáticas. Con sus errores y aciertos, como los de cualquier investigador, hizo valiosas aportaciones al desarrollo de esta ciencia, que convirtió en su pasión.

Se podría escribir de ella como científica, sin más, igualándola a sus colegas de la época, como Lagrange, Legendre o Fourier, en cuyas biografías nadie se detiene a recalcar su género. Estoy segura de que Sophie hubiese deseado que no hubiese que señalar constantemente que fue una mujer. Querría decir que tuvo a su alcance todo aquello de lo que gozaron sus colegas: acceso a una formación, respeto por sus resultados y ausencia de paternalismo. Pero la realidad fue muy distinta. Como cualquier persona, fue fruto de sus circunstancias. No tuvo problemas por el dinero o por el color de su piel, los tuvo por ser mujer.

Laura Sánchez Fernández es licenciada en matemáticas y tiene un máster en comunicación de la ciencia. Su experiencia profesional está relacionada con el mundo de la edición, siendo autora de libros cuyo principal tema son las matemáticas.Sophie Germain no es un personaje anecdótico en la historia de las matemáticas. Con sus errores y aciertos, como los de cualquier investigador, hizo valiosas aportaciones al desarrollo de esta ciencia, que convirtió en su pasión.
Se podría escribir de ella como científica, sin más, igualándola a sus colegas de la época, como Lagrange, Legendre o Fourier, en cuyas biografías nadie se detiene a recalcar su género. Estoy segura de que Sophie hubiese deseado que no hubiese que señalar constantemente que fue una mujer. Querría decir que tuvo a su alcance todo aquello de lo que gozaron sus colegas: acceso a una formación, respeto por sus resultados y ausencia de paternalismo. Pero la realidad fue muy distinta. Como cualquier persona, fue fruto de sus circunstancias. No tuvo problemas por el dinero o por el color de su piel, los tuvo por ser mujer.